Nuestros barriles y la OPEP: falta de transparencia corporativa

Por María Fernanda Ballesteros, Ana Lilia Moreno y Viviana Patiño

El 20 de abril la Mezcla Mexicana de Petróleo bajó hasta los -2.37 dólares por barril. ¿Cómo es eso posible? Hay que poner esa histórica caída en contexto. Pero otros asuntos, relacionados con la opacidad en torno a la operación de principal Empresa Productiva del Estado nos llaman la atención, con el telón de fondo del proceso de negociaciones en el marco de la OPEP –el ‘cártel’ de países petroleros más importante del mundo–. 

Debido a la crisis provocada por la pandemia del Covid-19, la demanda mundial de combustibles se desplomó en un 30%, lo que equivale a 30 billones de dólares, por el impacto en la industria aeronáutica, el cierre de líneas de producción en manufactura y la reducción de movilidad de la población global.

Ante la caída de la demanda, surgieron desacuerdos entre Rusia –país fuera de la OPEP– y Arabia Saudita –el mayor productor de petróleo del mundo y miembro de la organización–. Se desató una guerra de precios que tiró el valor mundial del petróleo. La OPEP hizo un llamado para que distintos países redujeran su producción petrolera, incluido México. Lo que más nos llama la atención del acuerdo es el comportamiento de nuestro gobierno. 

Encontramos tres muestras de la falta de transparencia por parte del Gobierno federal.

Sobre la producción (el referente del que partimos)

¿Cuál es nuestra verdadera meta de producción?

El referente de producción que presentó Rocío Nahle ante la OPEP es de un millón 753 mil barriles por día que es la producción estimada de Pemex (sin socios) a junio. Con la reducción de 100 mil barriles diarios, que equivale al 6% de la producción nacional presentada, se llegaría a un millón 681 mil barriles diarios (mbd). Sin embargo, la producción aprobada en los Criterios Generales de Política Económica considera una producción de un millón 951 mbd. Esta diferencia no es menor, pues impacta en los ingresos petroleros presupuestados. 

(Esta gráfica sobre el producción de petróleo nacional la tomamos de la última entrega de los Números de Erario, nuestro análisis periódico y puntual de las finanzas públicas. Harías bien en revisarlo y suscribirte a su newsletter)

¿Cuál es la meta a la que nos convendría llegar en México?  

Ante la caída de los precios del petróleo, hay campos petroleros en los que se pierde más dinero produciendo que dejando de hacerlo. En este sentido, la Secretaría de Energía no ha presentado el análisis que muestra los beneficios de llegar a la meta de producción, considerando el precio actual 

Entre enero y abril 2020, el precio de la mezcla mexicana de petróleo ha decrecido cerca de 104%

Y a todo esto, ¿cuánto quedamos a deber?

Dentro de la carta de acuerdo presentada por la secretaria Nahle al secretario general de la OPEP, se señala que Estados Unidos se ofreció a reducir en 250 mil barriles adicionales para compensar los de México. Nada se ha dicho sobre los términos y condiciones de este acuerdo. ¿Cómo, cuándo, con qué se le va a pagar a Trump? Se deben hacer públicos los términos de pago y cumplimiento, así como el razonamiento económico que llevó a México a optar por este acuerdo. 

¿Y sí nos va cubrir el seguro?

En 2019, México contrató para el 2020…

  1. Una cobertura petrolera que protege una parte de los ingresos petroleros que recibe del gobierno federal frente a caídas en el precio del petróleo, y
  2. Una cobertura para 14% de la producción de Pemex.

Las coberturas son el equivalente a una póliza de seguro ante bajadas del precio del petróleo. Si la cotización del petróleo se mantiene débil o cae más de lo esperado, el Gobierno Federal de México asegurará los precios más altos posibles recibiendo un reembolso por el diferencial de precio.

Veamos…

  • Para 2020, el precio de la mezcla mexicana se tasó en 49 dólares por barril en el proyecto de ingresos del presupuesto federal. Entre enero y abril de 2020, el precio ha caído 80% 
  • El Gobierno Federal reportó al Congreso de la Unión que garantizó ingresos para respaldar el 100% del ingreso petrolero del presupuesto del país.
  • Ante la caída del precio de petróleo, el Gobierno de México no ha anunciado el cobro de alguna parte de la cobertura contratada.

Es un problema el que no se haga pública información de la cobertura petrolera para los ingresos fiscales de la SHCP. Hacienda ha señalado que revelar el costo implicaría dar señales al mercado que pueden encarecer la prima. Sin embargo, vemos cómo empresas petroleras que cotizan en bolsa o emiten deuda, como Pemex, sí hacen público el costo. En el caso de Hacienda, al tratarse de recursos públicos, con mayor razón deberían publicarse.