Percepción/expectativa: la seguridad no mejora

  Aumenta el número de mexicanos que piensa que la seguridad empeorará en los próximos meses, al pasar de 19% a 29% en el último año.

 Por primera vez, la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana  estima el número de víctimas de violencia sexual. En algunas alcaldías de la CDMX, como Cuauhtémoc, cerca de la mitad de las mujeres (47.7%) han enfrentado alguna transgresión sexual. 

    El porcentaje de personas que presenciaron consumo o venta de drogas se redujo en el 67% de las ciudades.

Durante el primer año de gobierno de la administración federal, la sensación de inseguridad no ha disminuido y la expectativa de que la situación de seguridad mejore en el futuro se ha desplomado. Con todo, esta percepción –que afecta las rutinas y las dinámicas de convivencia diaria–, varía en las diferentes regiones y ciudades del país.

Analizamos la edición del cuarto trimestre de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) 2019, elaborada por el Inegi, y la comparamos con la misma edición del año anterior. Esto fue lo que encontramos.

El miedo en las ciudades

A nivel nacional, la percepción de inseguridad en el cuarto trimestre de 2019 tuvo una ligera reducción en comparación con el mismo periodo del año anterior, al pasar de 73.7% a 72.9%. Sin embargo, este cambio no es significativo, por lo que podríamos afirmar que se mantuvo constante.

Un dato preocupante es que la percepción de inseguridad aumentó en el 44% de las principales ciudades del país. Los mayores incrementos se registraron en:

Mientras que las mayores reducciones las tuvieron las siguientes ciudades:

Las expectativas sobre la seguridad han cambiado considerablemente en tan sólo un año. Al momento de la toma de protesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, es decir, en diciembre de 2018, el 41% de los mexicanos pensaba que la seguridad en el país mejoraría, mientras que 19% pensaba que empeoraría. Un año después, sólo el 26% de los mexicanos es optimista y piensa que la seguridad mejorará. En cambio, el porcentaje de mexicanos que piensan que las cosas empeorarán en los próximos meses es de 29%.

Armas en nuestros alrededores

El reciente tiroteo en una escuela de Torreón nos volvió a recordar que el acceso de manera ilegal a armas de fuego es un grave problema. Siete de cada 10 homicidios se cometen con este tipo de armas. Pero, ¿los mexicanos perciben en su vida cotidiana este problema?

La ENSU nos permite conocer si los habitantes de las principales ciudades del país han escuchado detonaciones por arma de fuego cerca de sus casas. Ésta es una buena aproximación sobre la cercanía de las armas en nuestra vida cotidiana. Este fenómeno ha aumentado: en diciembre de 2013 el 22.1% de los encuestados reportó escuchar detonaciones. Para diciembre de 2019 esta cifra alcanzó el 42.9%.

Durante el último año, las urbes que registraron el mayor incremento de personas que escucharon disparos fueron:

Mientras que las ciudades que registraron la mayor reducción fueron:

Se percibe menos venta de drogas

El consumo y la venta de drogas están relacionados con delitos de alto impacto como extorsión, robos y homicidios, los cuales atentan contra la integridad física y patrimonial de las personas. Sin embargo, durante el último año, el porcentaje de personas que presenciaron este tipo de actividades se redujo en el 67% de las principales ciudades del país.

Las ciudades que registraron los mayores reducciones en el atestiguamiento de estas actividades fueron

Mientras que los mayores incrementos las tuvieron las siguientes ciudades:

Lo nuevo en la ENSU

Celebramos que a partir de esta edición la ENSU estima el número de víctimas de violencia sexual. Durante el segundo semestre de 2019, calcula que 1 de cada 5  personas con 18 años o más en zonas urbanas fue víctima[1] de al menos un tipo de acoso personal y/o violencia sexual en lugares públicos[2]. Sin embargo, este tipo de delitos tiene como principales víctimas a las mujeres. En algunas demarcaciones como Cuauhtémoc, en la Ciudad de México, cerca de la mitad de las mujeres (47.7%) han enfrentado alguna transgresión sexual, seguida de Zapopan en Jalisco (44.6%) y Azcapotzalco (41.7%).

Hoy más que nunca requerimos entender mejor la violencia urbana para diseñar soluciones que atiendan sus diferentes expresiones y sus causas, partiendo desde un enfoque local y con mecanismos de corresponsabilidad entre las autoridades federales y locales, así como la sociedad civil, academia y sector empresarial.

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[1] Cada informante pudo haber declarado más de una situación. Se refiere a alguna situación de violencia sexual como: “Le dijeron piropos groseros u ofensivos de tipo sexual o sobre su cuerpo que a usted le molestaron u ofendieron”, “Alguien intentó obligarle o forzarle usando la fuerza física, engaños, o chantajes a tener relaciones sexuales sin su consentimiento, o en contra de su voluntad”, “Le ofrecieron dinero, regalos u otro tipo de bienes a cambio de algún intercambio de tipo sexual, que a usted le pareció ofensivo o humillante”, “Le enviaron mensajes o publicaron comentarios sobre usted, con insinuaciones sexuales, insultos u ofensas sexuales, a través del celular, correo electrónico o redes sociales (como Facebook, Twitter, WhatsApp, etc.), que a usted le molestaron u ofendieron”, “Alguna persona le obligó a tener relaciones sexuales en contra de su voluntad”, “Alguna persona le mostró sus partes íntimas o se tocó sus partes íntimas enfrente de usted, y usted se sintió molesta(o), ofendida(o), o atemorizada(o)”, “Le manosearon, tocaron, besaron o se le arrimaron, recargaron o encimaron con fines sexuales sin su consentimiento”, “Le enviaron mensajes, fotos, videos o publicaciones con insinuaciones, insultos u ofensas sexuales que fueron ofensivos o amenazantes a través del celular, correo electrónico o redes sociales (Facebook, Twitter, WhatsApp, etc.)” y “Le obligaron a mirar escenas o actos sexuales o pornográficos (fotos, revistas, vídeos o películas)”.

[2] Se refiere a que le haya sucedido en “en la calle, en el transporte público, en el parque, o algún lugar recreativo (cine, antro, etc.) o en otro lugar público (iglesia, centro comercial, mercado, plaza pública).”